¿Cuáles
son los beneficios que dan los chupones a los bebes y desde que edad a que edad
se debe dar estos?
La mayoría de los bebés tienen un fuerte reflejo de succión.
Incluso, algunos bebés se succionan el pulgar o los dedos antes de nacer. Más
allá de la nutrición, succionar suele producir un efecto relajante y calmante.
Esa es la razón por la que muchos padres clasifican los chupetes como
imprescindibles.
Sin embargo, ¿los chupetes realmente son buenos para tu bebé? Hay que comprender los beneficios y los
riesgos del uso del chupete.
Los beneficios.-
Para algunos bebés, los chupetes son la clave de la satisfacción
entre las comidas. Considera los beneficios:
·
El chupete puede calmar al bebé. Algunos bebés son
felices cuando succionan algo.
·
El chupete ofrece distracción temporaria. Pueden ser ideales
durante las inyecciones, los análisis de sangre y otros procedimientos, o
después de estos.
·
El chupete puede ayudar a tu bebé a dormirse. Si tu bebé tiene
problemas para tranquilizarse, es posible que un chupete sea suficiente. Su uso
parece no tener ninguna repercusión en la cantidad de horas de sueño o en el
hecho de que el bebé se despierte de noche.
·
El chupete puede aliviar el malestar durante los vuelos. Los bebés no pueden
«destaparse» los oídos de manera intencional tragando saliva o bostezando para
aliviar el dolor de oídos que se produce a causa de los cambios en la presión
de aire. Succionar un chupete puede ser útil.
·
El chupete es desechable. Cuando sea el momento de
abandonarlos, tíralos. Si tu hijo prefiere succionarse el pulgar o los otros
dedos, puede ser más difícil terminar con ese hábito.
¿Se
puede dar cualquier tipo de chupón?
Para que el chupete
sea seguro debe cumplir con las normas fijadas - AENOR (Asociación
Española de Normalización y Certificación) indica que debe estar hecho de material
plástico, tener bordes redondeados, poseer una anilla o tirador que permita
extraerlo de la boca y la tetina no puede ser superior a 3,3 cm. Por último, la
base del chupete debe ser lo suficientemente grande para evitar que el niño
pueda introducirse todo el chupete en la boca, con el consiguiente riesgo de
asfixia.
En cuanto a los
cuidados, es aconsejable cambiarlo con cierta frecuencia, sobre todo cuando el
niño ya tiene dientes, para evitar que el niño se atragante con los pequeños
fragmentos que pueda arrancar al mordisquearlo.
No ponga el chupete al niño sujeto con una cuerda o collar
alrededor del cuello por el riesgo de asfixia que existe.
¿Tiene
un límite de uso?
Cuando un niño se
introduce la tetina de un chupete en la boca y lleva a cabo lo que los expertos
denomina succión no nutritiva (el propósito de este acto no es ingerir alimento
alguno) los dientes centrales inferiores se desvían paulatinamente hacia
dentro, mientras que los que se encuentran en el mismo plano, pero en el
maxilar superior, tienden a separarse y a sobresalir hacia fuera (dientes de conejo).
Con el tiempo, los caninos (colmillos) chocan entre sí y ambas filas de dientes
no se cierran correctamente (mordida abierta). Además, la acción de succionar
pone en funcionamiento una serie de músculos de la cara que, junto con la
posición de la lengua, hacen que, finalmente las líneas superiores e inferiores
pierdan su paralelismo (mordida cruzada).
Se estima que, para
que las malformaciones sean apreciables, es necesario ejercer una presión más o
menos constante durante seis horas diarias, aproximadamente. El factor
tiempo, junto al de la energía y fuerza que el pequeño aplique en la succión
marcarán la diferencia en este aspecto.
La edad ideal para retirar
el chupete es hacia los 2-4 años. Previamente habrá que ir acostumbrando al
niño a usar el chupete sólo cuando se vaya a la cama o en situación de mucha
tensión emocional. No está claro cuál es la mejor técnica, si la retirada
brusca o la paulatina; en cualquier caso sí que será aconsejable que los padres
permanezcan más atentos en esos días para tranquilizar al niño y que éste no
reclame su chupete.
No está demostrado
que el uso del chupete hasta los 3-4 años se relacione con alteraciones en los
dientes. Sin embargo, el uso en niños mayores sí está relacionado con la
aparición de mordida abierta, o sea, que al cerrar la boca queda una separación
entre los dientes superiores y los inferiores, que debería ser valorada por
un odontopediatra
y Ortodoncista pediátrico.
¿Cuáles
son las desventajas del uso del chupón?
Desventajas
Por supuesto, los chupetes también presentan inconvenientes.
Considera las desventajas:
·
El uso temprano del chupete puede afectar la
lactancia. Succionar un pecho es diferente de succionar un chupete o
un biberón, y algunos bebés son sensibles a estas diferencias. Algunas investigaciones
asocian el uso del chupete con una lactancia menos frecuente o, en ciertos
bebés, con el fin de la lactancia después de solo algunos meses. Sin embargo,
una revisión del uso ilimitado del chupete en bebés saludables que nacieron a
término concluyó que no tiene repercusiones en la continuación de la lactancia.
·
Es posible que tu bebé se vuelva dependiente del
chupete. Si
tu bebé usa un chupete para dormir, es posible que enfrentes crisis de llanto
en medio de la noche con frecuencia cuando el chupete se caiga de la boca del
bebé.
·
El uso prolongado del chupete puede causar problemas
dentales. El uso normal del chupete durante los primeros años de
vida no provoca problemas dentales a largo plazo. No obstante, el uso
prolongado del chupete puede provocar que los dientes del niño estén
desalineados o que no salgan adecuadamente.
¿Qué
cuidados se debe tener cuando comienzan a salir los dientes ?
Lo que preocupa a los odontopediatras
en relación a la influencia de los chupones en la dentición, además de que la
succión no nutritiva se prolongue hasta la erupción de las piezas permanentes,
es la llamada caries .
Puede aparecer por un uso indebido del chupete
(untarlo con excesiva frecuencia en algún líquido dulce y dárselo al bebé . Estos
hábitos están absolutamente desaconsejados, de esta forma, en la
boca de los bebes más mayores coincidirán, durante un plazo más o menos
prolongado, las piezas temporales o “de leche” con las definitivas, pudiendo
resultar afectadas estas últimas por las caries de las de leche.
¿Cómo
se evita las caries en los bebes que usan chupones?
La prevención
de la caries dental en bebes que usan chupones.
- Después de cada
comida, limpie las encías del niño con una gasa estéril y humedecida en agua hervida natural.
- A los niños
menores de 3 años, las personas encargadas de su cuidado deben comenzar a
cepillarles los dientes tan pronto como empiecen a salirles, utilizando
una cantidad de pasta de dientes fluorada no mayor que una mancha en el
cepillo o el tamaño de un grano de arroz. Cepille los dientes del niño
cuidadosamente dos o tres veces al
día (por la mañana , tarde y por la noche. Supervise a los niños cuando se
laven los dientes para asegurarse de que utilizan la cantidad adecuada de
pasta de dientes y para controlar el buen cepillado dental.
- Si su bebé
utiliza chupete, déle uno que esté limpio; no lo introduzca en azúcar o
miel.
Cuando aparezca el primer
diente del niño, hable con el dentista odontopediatra para programar la primera
visita dental. Trate la primera visita al dentista igual que un chequeo con el
médico del niño. Recuerde: empezar pronto es la clave para una vida de buena
salud dental.
¿Qué
cuidados de salud e higiene tienen que tener los padres con los hijos?
Distintas
formas de esterilizar un chupón.
El método más común es la esterilización por vapor. Sin
embargo, hay un número de alternativas para conseguir que los chupetes del bebé
estén limpios y libres de gérmenes al mismo tiempo.
1. Esterilización por vapor
El comercio especializado en artículos para bebés
ofrece aparatos especiales en los que se pueden limpiar y esterilizar
sacaleches, biberones, tetinas y chupetes al mismo tiempo. Estos esterilizadores
producen vapor saturado de agua muy caliente que mata todos los microorganismos
de forma segura. En función del aparato, la esterilización dura de 8 a 15
minutos.
2. Hervir los chupetes
Por motivos de higiene, usar siempre la misma
cacerola. No utilizarla para cocinar otras cosas puesto que los residuos
alimentarios podrían generar gérmenes que se acaban asentando en la misma.
Primero, lo mejor es limpiar el chupete con agua
abundante. A continuación, ponerlo en la cacerola, cubrirlo completamente de
agua y dejar que hierva al menos durante 5 minutos.
3. Limpiar el chupete y esterilizarlo con agua fría
Para este método se necesitan unas pastillas
especiales. Dejar que se disuelva una pastilla completamente en un cuenco lleno
de agua limpia. Introducir el chupete de manera que quede totalmente cubierto.
Tapar el cuenco. Transcurridos unos 30 minutos se puede sacar el chupete, aclararlo
bien y ¡listo!
Este método resulta especialmente práctico en lugares en los que
no se disponga de corriente ni de una hornilla. Para limpiar los chupetes y
eliminar completamente los gérmenes, se necesita exclusivamente agua hervida o
agua mineral embotellada del supermercado y un cuenco.
Silicona o látex:
¿existen diferencias a la hora de limpiar el chupete?
La silicona es transparente, el látex por el contrario
es parduzco. Los dos materiales presentan ventajas y desventajas. Mientras que
los chupetes de látex son más elásticos, la silicona es más resistente al
calor. Los chupones de látex se vuelven porosas si se hierven con frecuencia,
de manera que se tienen que cambiar con más frecuencia que los productos de
silicona. Pero el tipo de material en sí no influye en las normas de higiene
básicas, es decir, se pueden limpiar y esterilizar de la misma manera.
Lo que se debe hacer y lo que no se debe hacer con el
chupete
Si decides darle un chupete a tu bebé, recuerda estos consejos:
·
Espera hasta que la lactancia esté consolidada. Si estás
amamantando, la American Academy of Pediatrics (Academia Estadounidense de
Pediatría) recomienda que esperes para ofrecerle el chupete hasta que tu bebé
tenga entre 3 y 4 semanas o después de haber establecido una rutina
de amamantamiento eficaz.
·
No uses el chupete como primera línea de defensa. A veces, cambiar de
posición o mecer al bebé un rato puede calmar el llanto. Ofrécele el chupete a
tu bebé solo entre las comidas o después de ellas.
·
Elige los chupetes de una pieza de silicona. Los chupetes de dos
piezas representan un riesgo de atragantamiento si se rompen. Una vez que
elegiste tu chupete favorito, ten algunos reemplazos idénticos a mano.
·
Deja que tu bebé marque el ritmo. Si tu bebé no está
interesado en el chupete, no lo obligues. Si el chupete se cae de la boca del
bebé mientras duerme, no vuelvas a colocarlo en la boca.
·
Mantenlo limpio. Antes de ofrecerle
el chupete a tu bebé, límpialo bien. Hasta que tu bebé no tenga 6 meses y
su sistema inmunitario haya madurado, hierve el chupete con frecuencia Después
de los 6 meses, simplemente lava el chupete con agua y jabón. Resiste la
tentación de «enjuagar» el chupete en tu boca. Solo le pasarás más gérmenes a
tu bebé.
·
No le untes azúcar. No pongas sustancias
dulces en el chupete.
·
Mantenlo seguro. Reemplaza los
chupetes con frecuencia y usa el tamaño adecuado para la edad de tu bebé.
Presta atención a las partes que estén sueltas o a cualquier signo de deterioro.
Ten cuidado con los ganchos para chupete. Nunca ates el chupete a una cinta o
correa que sea lo suficientemente larga como para enredarse alrededor del
cuello de tu bebé.
Dejar el chupete
A medida que tu bebé crece, los riesgos de usar chupete comienzan
a superar los beneficios. Aunque la mayoría de los niños deja el chupete por su
cuenta entre los 2 y los 4 años de edad, otros necesitan ayuda para dejar
el hábito. Elogia a tu hijo cuando opte por no usar el chupete. Si tu hijo se
resiste a dejarlo, considera pedirle ayuda al médico o al dentista del niño.
Dra. Bianca Zambrana.
Ortodoncista Pediátrica y
Odontopediatra.